Publicado en 1985, Las máscaras democráticas del modernismo es uno de los libros
póstumos de Ángel Rama que más condiciones de resistencia o de silencio ha
experimentado. Se trata de un texto acechado desde su aparición por problemas de
datación, de referencias ausentes con respecto a su propia genealogía escritural, de
serias falencias a nivel de edición, entre otros. ¿Qué justifica entonces una segunda
edición 35 años después? De un lado, la articulación entre su forma imperfecta y la carga
temporal que arrastra permite volver a auscultar el lugar intermitente pero transversal que
el estudio del siglo XIX ocupó en la obra de uno de los críticos latinoamericanos más
importantes del siglo XX. De otro, frente a la contemporánea crisis radical de la
democracia históricamente elitista y masculina en tanto sistema representativo, frente al
debilitamiento de sus instituciones producido por cuatro décadas de saqueo neoliberal, los
capítulos de este libro pueden leerse como una contribución fragmentaria y dispersa a la
dimensión cultural en la genealogía de dicho proceso histórico. Bajo la edición de Hugo
Herrera Pardo, ediciones mimesis vuelve a poner en circulación Las máscaras
democráticas del modernismo en tiempos en que la aporía democrática —aquella idea
que para Rama era la mayor fuerza movilizadora en la historia de América Latina—
tambalea por una delgada y amenazante línea en que se imbrican estado de derecho y
estado de excepción.