El libro contiene dos ilustraciones de David Rosenmann-Taub; el motivo de la cubierta también es del autor, relevante al contenido del poemario.
A David Rosenmann-Taub, la característica que mejor lo define es su condición de poeta total, esto es, de un poeta que atiende a todos los aspectos de la realidad y que moviliza todos los recursos del lenguaje.