Escrita al ritmo de la matanza ocurrida el 5 de Septiembre de 1938, Los asesinados del Seguro Obrero fue una obra a la que Carlos Droguett volvió una y otra vez a lo largo de su vida y reescribió varias veces, siendo esta versión inédita que ahora publicamos la definitiva a la que el autor puso punto final en Suiza el Sábado 26 de Agosto de 1989. Editada inicialmente en septiembre.
De 1939 esta obra sentó las bases de la poética en que toda la obra de Carlos Droguett se inserta: la creación de un nuevo lenguaje que exprese una realidad oculta en nuestra literatura, la de la sangre que ha corrido en nuestra historia y no ha tenido reflejo en ella.
Sobre este idioma nuevo, único e inimitable el propio Droguett escribió que “tengo la impresión de que el lenguaje, las palabras, se interponen entre ellas y yo, suprimiendo torrencialmente puntos, comas, explicaciones obvias, descripciones inútiles… Esta fiebre da la sensación de vertiginosidad, de totalidad, a un estilo angustioso, acezante no por afán de improvisación, sino por necesidad de profundidad, es decir de realidad”.
“Publicar la sangre equivaldría a tomar la sangre como motivo literario. En una segunda acepción, publicar la sangre nos hablaría más que de los asuntos, de la actitud del narrador hacia su oficio literario… que las palabras mismas sean gotas de sangre, que la expresión se las arregle para patentizar el líquido caliente y palpitante en el cuerpo del relato”.