La autora reúne su experiencia profesional y personal para problematizar el pacto tácito de la blanquitud, donde el heredero blanco se identifica con otros blancos y se beneficia de esta herencia, tanto de manera concreta como simbólica, con el objetivo de proteger y fortalecer su grupo. En esta obra, la pionera en estudios sobre blanquitud argumenta desde una perspectiva interseccional que la esencia del racismo radica en la idea de un color "normal" y "universal" -el blanco-, un razonamiento que permea a través de generaciones y que obstaculiza alteraciones sustanciales en la jerarquía de las relaciones sociales y de poder. El pacto de complicidad que se establece permite que aquellos en el poder se mantengan hasta que sean reemplazados por otros de su mismo grupo. "El pacto de blanquitud" representa una contribución significativa para activismos y estudios sobre racismo, colonialismo, inmigración, afrolatinoamericanos, movimientos indígenas y luchas afrofeministas en Chile y América Latina. Este ensayo se presenta como una lectura necesaria en un contexto sociohistórico donde las retóricas y actitudes racistas y xenófobas han aumentado, especialmente en relación a los pueblos originarios, afrodescendientes y migrantes latinoamericanos que no se ajustan a los ideales de blanquitud criollo-nacionalista.La obra invita a complejizar la mirada sobre el racismo, abriendo un espacio para analizar no solo a los sectores y comunidades que lo sufren, sino también a aquellos que lo perpetúan y sostienen ideológicamente. La autora proporciona herramientas para entender cómo el racismo se manifiesta y se reproduce en diferentes contextos, alentando una reflexión crítica sobre las dinámicas de poder y exclusión en la sociedad contemporánea.
