La orientación de este libro es sobre todo política -o biopolítica-, y casi programática por su llamado a unirnos entre los que somos víctimas del 1% que domina el planeta. Es también un llamado a unirnos con la Tierra de la cual nunca deberíamos haber sido separados ya que compartimos un presente y un futuro común.
La búsqueda infinita y despiadada de ganancias por parte del 1% dominante, ha impuesto de manera antidemocrática uniformidad y monocultivos, división y separación, monopolios y control sobre finanzas, alimentos, energía, información, atención médica e incluso sobre los humanos y sus relaciones, con su corolario de pobreza y desnutrición, desplazamientos humanos de magnitudes espeluznantes, generando un profundo malestar social, desigualdad y polarización económica.
“La máquina del dinero está pensada para arrasar, destruir, agregar y acumular, externalizar y excavar, como una célula cancerígena que no sabe cuándo parar de crecer”, señalan sus autores. Y esa máquina fue creada y es usada por ese 1% “sin responsabilidad ni rendición de cuentas por sus acciones”. Debemos resistirnos a ella, creando alternativas no violentas de superación de esta manera de concebir nuestra vida juntos.
“Sólo como una comunidad de la Tierra y una humanidad unida en nuestras diversidades podremos mantenernos juntos, salir del precipicio y escapar del imperio destructivo, ecocida y genocida del 1%”.
Este libro ha sido traducido al castellano de manera conjunta y es publicado simultáneamente por varias editoriales en América Latina, todas miembros de la red hispanoamericana de la Alianza Internacional de Editoriales Independientes.