Flappers and Philosophers, primer libro de relatos de Scott Fitzgerald, surgió de una estrategia de la casa editorial Scribner´s: tras una novela exitosa había que publicar de inmediato un libro de cuentos.
En marzo de 1920 su ópera prima, A este lado del paraíso, se había convertido a los pocos días en la Biblia de su generación y de una frase publicitaria para promoverla Fitzgerald tomó el título para su nuevo libro: “Una novela sobre flappers [jóvenes transgresoras e independientes] para filósofos”. Es Fitzgerald un autor un tanto eufórico que con la publicación de cuentos en revistas pasa de ganar ochocientos setenta y nueve dólares en 1919 a dieciocho mil ochocientos cincuenta dólares al año siguiente; se trata de un autor que ya apostaba en su vida y obra al futuro, a la juventud y a la ambición, y que incorpora en su literatura inicial todos los elementos y la sutileza que lo convierten en una de las figuras centrales de la literatura del siglo veinte.