La historia de la ciencia y la tecnología ha tendido a estudiar a
agentes y prácticas circunscritos a las comunidades disciplinares,
marginalizando el estudio de la diversidad de actores y prácticas que
han contribuido a la construcción y circulación del conocimiento
científico. Tal es el caso de las mujeres que incidieron en la
circulación y generación de conocimiento en diversas disciplinas, y cuya
aportación aún no ha sido del todo estudiada.
También es el caso
de editores, distribuidores y lectores, circunscritos usualmente al
papel de mediadores o públicos del saber científico, pero que, como
demuestran los trabajos aquí presentados, dan cuenta de que no solo
incidieron en su legitimación social y disciplinar, sino que también
aportaron en ampliar los conocimientos en variadas áreas. Por ello, ha
resultado importante incluirles en la investigación historiográfica,
como las prácticas de lectura, escritura, edición e investigación
científica.
Este tomo I examina en su primera parte el estrecho
vínculo del género con la ciencia, analizando la contribución de las
mujeres en las ciencias y la influencia del género en el desarrollo del
ideario científico. En su segunda parte da cuenta de la estrecha
colaboración entre científicos, medios de comunicación y estrategias de
lectura y escritura en Chile.