El presente estudio recoge antecedentes relevantes durante la segunda mitad del siglo XIX, tiempo en el cual se desarrolló un hito trascendental en nuestro país, concretándose un giro significativo en lo que hasta ese entonces se había desarrollado en educación superior: el ingreso de la mujer a la Universidad. A más de 130 años de este memorable acontecimiento, resulta relevante volver la mirada a las primeras mujeres que con audaz inteligencia y con exorbitante capacidad intelectual dieron vida a que este hecho se pudiera concretar apelando a fundamentos que sostenían fuertemente sus convicciones.