La vida de Charlotte May parece perfecta, pero el día que cumple treinta años sufre una epifanía romántica y se obsesiona con que está incompleta: le falta un hombre a su lado. Necesita un novio que la saque del espantoso hastío de ser solo una mujer feliz: se gusta, tiene el trabajo de sus sueños y dinero en el banco, una familia que la quiere y comparte, con sus dos mejores amigos, un apartamento en Shoreditch, su barrio favorito de Londres.