Céleste Ugolin, novela de Georges Ribemont-Dessaignes (1884-1974), está considerada unánimemente como su primera gran novela y novela dadaísta por excelencia.
Publicada en 1926, contiene ya todas las obsesiones de su autor (la locura, el erotismo, la poesía, la libertad, los sueños, el amor), a la vez que una crítica, pues también se enfrenta al movimiento dadá y lo hace de forma satírica y cargada de humor negro.
Ni Breton ni Picabia ni Tzara, ni tan siquiera el propio Picasso, se libran de sus dardos envenenados, como tampoco ninguno de los «ismos» de la época (cubismo, surrealismo, comunismo), con sus respectivos lenguajes y manifiestos.
Céleste Ugolin no puede escapar al destino de su perpetuo peregrinaje intelectual. Abandona a Stella para enamorarse de una prostituta ciega, pero impotente para salir del misterio de esta mujer, la mata y huye. Una especie de violencia interior, una ironía feroz, una parodia exagerada de amor y vida pasan por esta novela.