Estas Cavilaciones de Álvaro Yáñez Bianchi fueron escritas en 1922, justo antes de que regresara a Chile desde París y comenzar con sus Notas de Arte en La Nación bajo el seudónimo de Juan Emar. En este libro asistimos a un camino de meditación en el que el autor busca aclarar a sí mismo su manera de comprender o sentir el mundo, e indaga cómo de este proceso de afinación se puede originar el mal.